Niños con TDAH utilizan con frecuencia servicios de salud antes del diagnóstico, según estudio
Un nuevo estudio llevado a cabo por investigadores de la Universidad de Nottingham y el King’s College London reporta que los niños diagnosticados con trastorno por déficit de atención e hiperactividad (TDAH) tienen el doble de probabilidades de utilizar servicios de salud en los dos años anteriores a su diagnóstico, en comparación con sus compañeros.
Según los investigadores, estos hallazgos subrayan la necesidad de que los profesionales de la salud consideren el TDAH como un diagnóstico potencial, especialmente en niños que buscan ayuda médica para problemas comunes como la amigdalitis, el asma o el eczema.
El estudio arroja luz sobre los desafíos que enfrentan los niños con TDAH y destaca la importancia de la identificación temprana y la intervención para prevenir problemas de salud a largo plazo.
En un nuevo estudio, los científicos informan que los jóvenes diagnosticados con TDAH tienden a utilizar servicios de salud a un ritmo que es el doble que el de sus compañeros en los dos años previos a su diagnóstico.
La investigación, publicada en la revista Archives of Disease in Childhood, informa que los niños con TDAH tienen el doble de probabilidad de consultar a su médico de cabecera, ser hospitalizados e incluso someterse a procedimientos quirúrgicos, en comparación con los niños que no tienen TDAH.
Según los investigadores, el estudio destaca la importancia de llevar a cabo investigaciones adicionales para identificar a los niños con TDAH en una etapa más temprana, lo que les permitiría recibir asistencia más oportuna y efectiva.
Reconocer el TDAH como un diagnóstico
Los expertos señalan la necesidad de crear conciencia sobre el TDAH para que los profesionales lo consideren como un posible diagnóstico.
Prasad explicó que “sabemos que los médicos de cabecera tienen dificultades para reconocer el TDAH como un posible diagnóstico”.
El Dr. Anandhi Narasimhan, especialista en psiquiatría de adultos, niños y adolescentes que no estuvo involucrado en esta investigación, dijo que los mayores beneficios que se derivarían de esta investigación serían “un mayor monitoreo y la posibilidad de una detección temprana e intervención”.
Con eso en mente, Prasad concluyó diciendo que “necesitamos diseñar mejores vías de atención médica que puedan priorizar correctamente a los jóvenes”.